Fuente: Continental ~ Gino Fisannoti, ex directivo de la firma norteamericana Nike por más de dos décadas, se suma a la compañía italiana, líder mundial en la industria de bienes textiles de moda.
Nadie esquiva las terribles consecuencias atraídas por el coronavirus a pesar que la firma italiana Moncler se ha convertido por dos años consecutivos (2019/2020) en líder de la industria de bienes textiles, de moda y de lujo según el Índice de sostenibilidad del Dow Jones tanto a nivel global y europeo. En él, se tienen en cuenta datos económicos, ambientales y también de responsabilidad social.
Por eso, para preparar la recuperación tras la pandemia y hacer frente a un mercado cada vez más competitivo, Moncler ha creado el puesto de director de marca. Y para inaugurar este nuevo cargo, la marca de plumíferos ha recurrido al argentino Gino Fisanotti, un directivo muy experimentado en técnicas de marketing y con una importante experiencia en el mundo del deporte, ya que ha trabajado durante más de 20 años en Nike.
Nacido estas tierras y arquitecto de formación, Fisanotti se incorporó a la marca deportiva estadounidense en 1997, ocupando diversos puestos de responsabilidad, entre ellos el reciente de director creativo de la marca global, que también inauguró en Nike. Durante estas dos décadas, supervisó la venta al por menor y la comercialización de la marca deportiva en América y Europa.
Fisanotti empezará a trabajar en Moncler el 7 de junio, reportando directamente al CEO, Remo Ruffini. En un comunicado, la firma explicó que ha creado el nuevo puesto de «director de marca para inocular la arquitectura, la estrategia y la narrativa de la enseña en todos sus puntos de contacto con el público, al tiempo que ayuda a la empresa a expresarse como un nuevo concepto de lujo».
En paralelo a este nombramiento, la compañía anuncia que el actual director de marketing y operaciones, Roberto Eggs, que se incorporó a Moncler en 2015, asumirá el cargo de director de estrategia empresarial y mercados globales. «En un contexto competitivo de cambios constantes y rápidos, es fundamental que las marcas mantengan una identidad significativa y coherente con el espíritu del momento, que refuercen la conexión con su propia comunidad, que creen experiencias que vayan más allá del producto y que sigan representando valores fuertes y auténticos», subrayó Moncler.