Fuente: iProfesional ~ El Gobierno terminó de negociar con los bancos la puesta en marcha del nuevo «Ahora 12 Recargado», que será anunciado el próximo lunes como una de las medidas para levantar el consumo popular en medio de la campaña electoral.
El relanzamiento del programa incluirá la posibilidad de financiar en cuotas ya no sólo consumos a 6 y 12 meses, sino también la posibilidad de extender el beneficio a 24 y hasta 30 meses. Es decir, algo que se compre en los próximos días terminará de pagarse durante el mandato del próximo Presidente. O Presidenta.
Todavía no está definido si volverá también la chance de «comprar ahora y empezar a pagar a los 90 días», algo que sí estuvo en el menú de posibilidades hasta comienzo de año.
La renovación del programa requirió de una ardua negociación con los bancos ya que se negaban a «subsidiar» consumo a largo plazo, en medio de una inflación que se encuentra en el 50% interanual.
Para el Gobierno, este relanzamiento en el inicio de la campaña resulta crucial: el consumo no arranca. Parece lógico en medio de una economía con una inflación acelerada y salarios que no logran ganarle la carrera a los precios.
El balance del primer semestre también cerró en rojo: el consumo masivo registró una baja del 7,4% en relación a enero-junio del 2020, de acuerdo a la consultora Scentia.
Por ahora, el Gobierno lanzó algunas medidas para mejorar el cuadro, pero hasta ahora no alcanzaron.
La última fue conocida en las últimas horas, con la compensación a los jubilados, cuyos haberes perdieron contra la inflación. Para los que ganan hasta dos salarios mínimos ($46.130) habrá un bono de $5.000, por única vez, a cobrar recién en agosto.
Desde el kirchnerismo le reclaman a Guzmán más audacia para tomar medidas que ayuden a mejorar el escenario. El Gobierno apuesta sus fichas a incrementar el consumo de cara a las elecciones
Detalles del nuevo «Ahora 12
Los teléfonos celulares quedarán fuera del programa: al Gobierno no le interesa subsidiar consumo de productos que, en definitiva, sólo se ensamblan en la Argentina y que en muchos casos tienen precios superiores a los electrodomésticos o indumentaria, que sí se fabrican en el país.
No todos los rubros podrán financiar a los plazos más largos -de entre 24 y 30 meses- sino que la idea es que puedan utilizarse en aquellos que aseguran producción y mano de obra nacional, como televisores, muebles, juguetes y colchones.
La idea también pasa por beneficiar a algunos de los sectores de la economía severamente golpeados por las restricciones en la pandemia, como la gastronomía, indumentaria, calzados y el turismo.
Miguel Pesce, titular del BCRA, fue el encargado de limar las diferencias. Las entidades financieras se resistían a financiar compras al 25% anual (costo del Ahora 12) cuando la tasa de referencia asciende al 38% anual.
El contraargumento de los funcionarios fue que los bancos perciben esa tasa de interés de parte del Estado -en la colocación de Leliq- pero que tienen gran parte de sus depósitos en cuentas a la vista que tienen una remuneración del 0%. Con lo cual tienen margen para «perder» algunos puntos de rentabilidad cuando financian consumos de sus clientes.
Como parte de la negociación también se acortarán los plazos para que los bancos cobren los consumos de sus clientes. Y se les permitirá a los bancos a utilizar una porción de este financiamiento como parte de los encajes.
A su vez, las entidades financieras accedieron a ampliar el margen de consumo con tarjetas de sus clientes, algo que algunos bancos venían «pisando» para reducir los riesgos de morosidad.
La renovación del «Ahora 12» -un plan que vence este fin de semana- es crucial para el consumo masivo. De acuerdo a la empresa Prisma -dueña de las tarjetas de crédito-, seis de cada diez compras que se hacen en cuotas son efectuadas a través de ese programa oficial.
Y representan el 24% de todos los gastos con tarjeta. Nada menos.
Para tener otra idea de la relevancia de este plan, en junio las ventas reales en precios constantes con Ahora 12 se ubicaron 4,2% por encima de las de junio de 2020. Así, en el primer semestre fueron 16,3% superiores a las del mismo período del año pasado, de acuerdo a las mediciones del Ministerio de Desarrollo Productivo.
La renovación del plan también será con un control más exhaustivo del cumplimiento. La Secretaría de Comercio Interior imputó hace unos días a 15 entidades por comercializar bajo los beneficios del programa «Ahora 12», bienes y servicios que no forman parte de la oferta de rubros que propone el programa de fomento al consumo.
A partir de un requerimiento de información a las empresas, y un trabajo de fiscalización y monitoreo de todos los productos ofrecidos a través de plataformas de comercio electrónico, la Secretaría de Comercio Interior constató la existencia de bienes y servicios no incluidos dentro de los rubros incorporados al Programa «Ahora 12».
Además, se detectó la existencia de productos importados brindados para su adquisición con las medidas de financiamiento preferenciales provistas por el Programa, cuando bajo su órbita sólo pueden comercializarse productos nacionales. Te puede interesar
Justamente, el objetivo es fomentar el consumo y la producción nacional a través de condiciones de financiación más convenientes, para facilitar el acceso a los productos y servicios alcanzados.