Fuente: BAE ~ Frente a la asunción del nuevo gobierno, que prometió tener como eje central a la industria, los sectores sensibles salieron a plantear un endurecimiento en los controles a las importaciones, que «han devastado» la producción local en los últimos cuatro años.
A partir de un relevamiento de BAE Negocios surgieron innumerables medidas, pero se destacó el regreso al cumplimiento obligatorio del plazo de 60 días para aprobar licencias no automáticas de importación (LNA), como establece la Organización Mundial Del Comercio. Varios industriales coincidieron en que la gestión de Cambiemos licuó las LNA, que en la actualidad «no existen» como tales porque se aprueban como máximo en una semana.
El presidente de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete, Emmanuel Poletto, expresó a este medio que «lo peor es el comercio desleal, como sucede en el caso de los triciclos, donde hay abierta una investigación por dumping en importaciones de China a precios viles, que generaron daño importante en los fabricantes nacionales». La entidad ya elevó al gobierno electo propuestas para mejorar los controles, como el retorno del régimen de aduana especializada para juguetes, derogado en 2017, el cual es importante para el control de normas de seguridad. «Otro reclamo es controlar la subfacturación y poner valores-criterio a más partidas arancelarias«, además de reinstaurar la garantía en efectivo en lugar de seguros de caución para la diferencia de tributos, marcó Poletto.
En el mismo sentido, el secretario de la Fundación Pro Tejer, Luciano Galfione, también pidió por el regreso de las «aduanas especializadas», ya que «fueron destruidas por este gobierno y no tiene sentido mandar veedores». En cuanto a los valores-criterio de la Aduana, «hay que ampliar a algunas posiciones, y en otras tal vez no tiene sentido», agregó. El directivo coincide en que «las licencias no automáticas a 60 días deben volver al centro de la escena porque hoy están a una semana, casi que todo es automático».
Por su parte, el titular de la cámara que agrupa a fabricantes de marroquinería, Ariel Aguilar, manifestó: «Vamos a pedir la suba del arancel externo en productos realizados con cuero, y la elevación de los valores criterio. Además, tenemos que volver a fuertes garantías en efectivo para combatir la subfacturación y no más seguros de caución de dos mangos con 50″. El director ejecutivo de la autopartista AFAC, Juan Cantarella, sostuvo que «uno de los principales reclamos es la baja de los derechos a la exportación que afectan la competitividad«, y dijo que «mayores ventas al exterior servirían para morigerar la caída del mercado interno». Ligado con este punto, sostuvo que «hay que cambiar la forma de cálculo ya que en las retenciones paga solamente lo nacional y no lo importado, lo cual es un sinsentido».
A su vez, la industria del conocimiento no se queda atrás con planteos que potencien la producción. Carlos Norryh, uno de los referentes de Pymes Sur (entidad que agrupa a firmas de tecnología de punta) señaló que «el sector precisa protección para el mercado interno si por ejemplo se busca el desarrollo de vehículos eléctricos y baterías de litio». También pidió menor carga impositiva para el segmento del software.