Fuente: Infobae ~ Reconocidos diseñadores de modas de nuestro país están actualmente recluidos en sus respectivas casas, como el resto de los argentinos. Tienen sus ateliers y locales con las puertas cerradas al público y solamente se comunican vía online o a través de videollamadas con sus fieles clientes que siguen eligiendo sus creaciones también a la distancia.
La mayoría de ellos tenía contemplado presentar sus colecciones en el mes de marzo y abril en el marco de la semana de la moda, alrededor de la cual está pautada la agenda fashionista para muestras en sociedad de las colecciones de otoño-invierno.
En un comunicado, la Camara Argentina de la Moda remarcó su acompañamiento y su apoyo a los trabajadores del mundo de la moda, la industria textil y el comercio, en el momento difícil por el que atraviesa todo el país y declaró la “emergencia en la moda”. La actividad que ejerce cada uno de los diseñadores argentinoscomprende la que ocurre en talleres propios, con pequeños talleres y a quienes trabajan con modistas que realizan sus prendas en forma particular.
Sin embargo, este sector hoy se ve totalmente afectado, no solamente por la cuarentena, sino también por la falta de insumos, los altos costos, los impuestos, los alquileres y los sueldos y gastos en general.
Infobae dialogó con Evangelina Bomparola, Fabián Zitta, Pía Carregal, Maureene Dinar y Patricia Profumo sobre cómo están sobrellevando la cuarentena, cómo afectó a cada uno en particular la llegada del coronavirus en la moda y cómo se preparan para la próxima temporada.
Evangelina Bomparola tiene su tienda sobre la avenida Alvear y Ayacucho, en el barrio porteño de Recoleta, pero desde el mes marzo, cuando decretaron la cuarentena obligatoria, éste permanece cerrado. Sin embargo, desde el lunes 11 de mayo está en el local de 12 a 16hs para atender por videollamada a sus clientas y asesorarlas por esa vía.
“Desde que tenemos las puertas cerradas, las ventas de esta colección fueron de un 60% de ventas sobre lo producido a través de estrategias de venta por webcam y vía WhatsApp”, detalló Evangelina, sorprendida por no ser la forma que normalmente estaban acostumbrados a vender sus piezas.
Con más de 18 años de historia en el diseño de modas, dijo que tienen un chat junto a todos sus empleados en el que todos cuentan los resultados de la tareas que le toca a cada uno,y están conectado 24 horas los 7 días de la semana. Ese chat sirve para “resolver las ventas, proyección de futuras colecciones, administración de gastos y para discutir ideas e inquietudes que cada uno plantea”.
¿Qué hicieron por el COVID-19? Están fabricando protectores faciales de seda natural reversibles diseñados con los colores característicos de la colección de invierno y algunas estampas. Están bordados con cristales con el logo de la marca (EB) y ya va van por la tercera serie y las entregas las hacen personalmente o con un taxista de confianza. Cierran los pedidos al vacío con previa desinfección con alcohol al 70%.
La diseñadora Pía Carregal compartió con Infobae que su colección actual de invierno ya se encuentra disponible en su tienda online a pesar que no pudo ser presentada mediante un desfile como hubiera querido.
“Nosotras ya preparamos el lugar con el protocolo indicado para cuando se abra”, dijo la diseñadora con muchas ansias por abrir las puertas de su local sobre la coqueta avenida Quintana en Recoleta.
Contó que por ahora está trabajando a puertas cerradas en su atelier tres veces por semana para despachar los pedidos online y la producción nueva de verano. “No sabemos aún en el verano cómo vamos a presentar, suponemos que también online”, confesó Pía.
¿Cómo es la relación con sus clientas y los pedidos? La diseñadora se comunica con ellas a través de videollamadas y por WhatsApp para la confección de vestidos y piezas by Pia Carregal.
¿Qué hizo por el COVID-19? Diseñó barbijos especiales para sus clientas en cuero.
Fabián Zitta tiene su atelier en Quintana 10, en el corazón de Recoleta. Es el elegido por las celebridades para los mejores eventos fashionistas pero este invierno tampoco pudo presentar su soñada colección. “Estamos hace dos meses cerrados, pero dentro de todo lo negativo nos reinventamos y armamos un sistema de venta en casa. Le acercamos a nuestras clientas una funda con prendas para que se prueben tranquilas y prácticamente todas accedieron a este método. Para eso hicimos una colección prêt-à-porter y seleccionamos de acuerdo al perfil de cada clienta”, detalló Zitta a Infobae.
Como adelanto exclusivo, el diseñador está preparando unos cursos de diseño online y una línea de novias para el próximo verano que sorprenderá a todos.
Patricia Profumo, refugiada en su casa junto a su esposo y su pequeña hija Mía, poco pudo disfrutar de la apertura de su nueva maison. Con la colección de invierno ya lista para ser presentada en sociedad, la diseñadora confió a Infobae que la dejará guardada para el próximo.
“Estoy trabajando mucho con Network Marketing, una empresa americana y también armando mi próxima colección para el verano. También atendiendo a las clientas online, un método distinto e inesperado, asesorando de manera virtual, vía videollamada, WhatsApp y también por Zoom para tener aunque sea el contacto con ellas”.
La diseñadora Maureene Dinar terminó la temporada de verano 2020 con un desfile en la ciudad uruguaya de Piriápolis. Con las esperanzas de volver a Buenos Aires y tener ya lista su colección de invierno para realizar las fotos de la campaña, Maureene tenía repartida en los talleres los diseños pero no le pudieron entregar todavía ninguna de sus creaciones.
“Tenía todo programado para hacer el 22 de marzo, estaba listo para hacer la campaña, el fotógrafo, la agencia de modelos, el desfile programado para abril. Pero me di cuenta de que el coronavirus estaba avanzando y yo tomé la iniciativa de hacer un ‘parate’ el 9 de marzo y ahí fue cuando también llegó la cuarentena”, dijo a Infobae la diseñadora.
Dinar contó que diseñó con muchas energías y con mucho amor la colección de invierno, aunque sabe que esta temporada va a pasar y no va a ser posible ni mostrarla ni mucho menos poder hacer un desfile, ya que todos “los eventos se apagaron”. Tiene la esperanza de poder abrir la temporada de verano, pero a su vez, también lo ve incierto.