Fuente: TN – Carlos Almiroty, presidente de la Cámara Algodonera Argentina, afimó ante TN que “el cultivo tiene pasado, presente y un futuro enorme. En pocos países se da que haya mercado interno y externo”.
Latemporada algodonera comenzó oficialmente en Avia Terai, Chaco, con la apertura formal de la campaña de deslinte de semillas de algodón 2024/25 por parte de la Asociación de Semilleros Argentina (ASA) y la Cámara Algodonera Argentina (CAA).
En una entrevista con TN, Carlos Almiroty, presidente de la Cámara Algodonera Argentina, destacó el potencial del sector. “El algodón tiene un pasado, un presente y un futuro enormes. Contamos con un negocio que es poco común en otros países y con dos canales de comercialización sólidos”, afirmó.
En ese sentido, Almiroty destacó que, a pesar de los desafíos económicos, la industria textil logró actualizarse tecnológicamente gracias a la inversión durante años difíciles. “El campo tiene toda la tecnología, la industria textil está actualizada, ha invertido mucho en estos años en el que el campo regaló sus dólares al tipo de cambio oficial al que nos sometieron y nos robaron”, afirmó.
Sin embargo, advirtió sobre el equilibrio necesario entre proteccionismo y apertura: “Hay que tener cuidado de pasar de un proteccionismo cavernícola a una apertura suicida; nos quedaremos sin industria y todo lo que ya sabemos”.
Al abordar las proyecciones, Almiroty señaló incertidumbres para la campaña 2024/25
El presidente de la CAA también expresó su preocupación por la situación actual del sector: “El productor algodonero está complicado. Fue una siembra que concluyó bien a fin de año, pero a partir de ahí se fue descalabrando todo”.
Las condiciones climáticas adversas, como altas temperaturas y lluvias irregulares, junto con plagas inusuales, afectaron la calidad y los rendimientos del algodón. “Los algodones que van saliendo ahora tienen una calidad que ha caído bastante, de regular a mala. Y los rendimientos en campo son flojos”, detalló Almiroty.
Al hablar de proyecciones, señaló que la campaña 2024/25 presenta incertidumbres: “Este año habíamos dado un salto de crecimiento en cuanto a área de siembra: había aumentado un 20% con respecto al año anterior. Va a depender de cómo cierre esta campaña”.
Además, destacó la necesidad de estabilizar la macroeconomía para incentivar el sector: “Uno de los incentivos clave que necesita la Argentina es estabilizar la macroeconomía porque como veníamos en picada. Eramos un avión en caída libre como país, como economía. Lo que necesita el algodón es que se elimine el cepo, y en paralelo terminar con las retenciones”.
En ese sentido, expresó su frustración por la falta de cambios en políticas cruciales: “Nos dicen que hay que darle tiempo al Gobierno, pero nosotros seguimos esperando. Lo que yo vi en concreto es que a fin de año nos quisieron subir las retenciones y que nos salvamos de milagro, gracias a que los gobernadores y legisladores de las provincias de las economías regionales dijeron que no”.
Asimismo, la incertidumbre económica se cierne sobre el sector algodonero, que aguarda la eliminación definitiva del cepo cambiario. “Estamos a la espera de que se elimine de una vez por todas para tener el tipo de cambio real”, expresó con preocupación un representante del sector, señalando el peso que esta medida tiene sobre la agroindustria y otros sectores.
La posibilidad de una apertura descontrolada de importaciones ya generó malestar en varias economías regionales. “Ya escuché varios amagues porque amenazan con cuestiones abusivas de precios supuestamente. Esto ya lo vio la Argentina, por eso es otro aspecto que inquieta al sector”, afirmó el presidente de la CAA.
Por último, afirmó que el sector se encuentra en una encrucijada, con un futuro incierto ante las políticas económicas fluctuantes. “Ser productor algodonero es un estilo de vida y se sigue apostando a que el año que viene va a ser mejor”, reflexionó. Subrayó la resiliencia del sector.
Sin embargo, la falta de estabilidad y las trabas gubernamentales representan un desafío constante. “Los distintos gobiernos a lo largo de la historia de la Argentina se aprovechan de eso, lo cual es un suicidio para toda la sociedad”, lamentó.