Fuente: BAE – En los últimos tres años, el sector concretó inversiones por 700 millones de dólares. Señalan al sector de comercialización y a los impuestos duplicados como responsables por los altos precios de la indumentaria que se vende al público.
La industria textil, un sector que emplea más de 100.000 personas en forma directa, experimentó una caída en el uso de su maquinaria desde agosto, cuando el Gobierno decidió una devaluación de la moneda y los precios de todos los bienes y servicios impactaron en el poder adquisitivo.
Fuentes del sector indicaron que las inversiones, que en los últimos tres años acumularon unos 700 millones de dólares, se ven hoy dificultadas por las trabas que los bancos comerciales imponen a la hora de requerir los dólares para importar.
La industria también responsabiliza al eslabón comercial por el aumento desmedido de precios de las prendas de vestir terminadas y puestas a la venta al público, algo que reflejan las últimas estadísticas oficiales. Argumentan que la evidencia puede encontrarse en la diferencia entre los números de la inflación mayorista y minorista del sector.
Enumeran que los problemas para la industria en general y textil en particular son las altas tasas de interés que elevan el costo financiero, la infrauestructura, la energía, los impuestos y la burocracia.
De acuerdo con datos de la Fundación Pro Tejer, la utilización de la capacidad instalada del sector textil se encuentra en niveles menores a los del año pasado, lo que implica que aún no se recupera la medición alcanzada en 2017 y 2016.
El sector textil mantuvo un uso de la capacidad instalada de 55,6% en enero-agosto 2023, menor al mantenido durante el mismo período del año 2022, aunque superior a la mantenida durante los años 2018 a 2021.
En agosto 2023, el sector sostuvo una utilización de la capacidad productiva de 59,3%, menor a la de agosto 2022 y cercana al porcentaje utilizado en el año 2019, evidenciando nuevamente que el sector continúa en los niveles de actividad anteriores al efecto de la pandemia.
Inversiones
De acuerdo con datos de Pro Tejer, la industria textil y la fabricación de prendas de vestir experimentaron una fuerte recuperación de la inversión luego de la caída evidenciada en 2019 y 2020, superando al conjunto de las incorporaciones realizadas entre 2015 y 2018.
Proyectan que la inversión realizada en el año 2023 alcance los 218 millones de dólares, por lo que será el segundo año récord en cantidad de compras de maquinaría y tecnología desde el año 2015, luego del año 2022 cuando se alcanzaron compras por 250 millones dólares.
Durante los últimos años, el sector indica que se observa un fuerte incremento de las inversiones realizadas en todos los eslabones de la cadena, destacándose la incorporación de tecnología en el sector de acabado y de confección realizadas durante el año 2022, y las del sector de hilandería y tejeduría durante los años 2021 y 2022.
La cadena de valor sólo interrumpió el proceso inversor durante los años 2019 y 2020, recuperó rápidamente el impulso post pandemia en el año 2021, y viene realizando un recambio tecnológico en los últimos años, principalmente orientado a la incorporación de herramientas que permiten mejorar el control del proceso productivo y prevenir el mantenimiento de los equipos, optimizando costos y tiempos de producción.
La evolución reciente del proceso inversor del sector permite inferir que la adquisición de tecnología en los últimos tres años está asociada principalmente con la búsqueda de la ampliación de la capacidad productiva sectorial, en virtud de la magnitud de los montos incorporados.
Inflación de la ropa
El IPC de prendas de vestir y calzado registró en el mes de septiembre de 2023 un aumento del 118,6% interanual y de 15,7% en comparación con el mes de agosto 2023.
El IPC de Indumentaria y Calzado mensual subió 15,7% en septiembre, mes que coincide con la llegada de la nueva temporada de primavera-verano en el sector. Por otro lado, el IPC de prendas de vestir y calzado es el segundo rubro con menor crecimiento interanual en septiembre y menor crecimiento acumulado desde diciembre 2022 (luego de transporte).
Los precios mayoristas del promedio de la economía crecieron 138% al comparar septiembre 2023 con el mismo mes del año anterior. Mientras que, los precios de productos textiles se incrementaron 98,6% (siendo uno de los rubros menor aumento de todos los manufacturados) y los de indumentaria 114%.
Empleo textil
El dato de julio 2023 da cuenta del tercer año consecutivo de creación de empleo formal en el sector, luego de la pérdida de más de 25.000 empleos entre los años 2016 y 2019, y del impacto en el empleo producto de la pandemia.
En julio 2023, la industria textil y la fabricación de indumentaria generaron 13.078 nuevos puestos de trabajo registrados (contra julio 2020), siendo la tercera actividad industrial con mayor creación de empleo dentro los 24 rubros analizados, luego de la creación de empleo registrada en producción de alimentos y elaboración de productos de metal.
La cadena de valor es la segunda en materia de empleo registrado dentro del sector industrial (luego del sector de Fabricación de Alimentos) a nivel país, con un 8,1% del total del empleo industrial registrado, y la primera industria en materia de generación de empleo en las provincias de Catamarca (Confección) y La Rioja (Textil).
La industria textil y la de fabricación de prendas de vestir generaron 4.300 nuevos puestos de trabajo registrados en julio 2023 (vs. julio 2022), siendo el segundo sector industrial de mayor creación de empleo en el último año, luego de la producción de alimentos.
La cadena de valor textil y de indumentaria empleó 101.079 personas a julio 2023 y es una de las principales industrias generadoras de empleo a nivel provincial, remarcando la importante participación federal del sector.
Es la principal empleadora industrial en la provincia de La Rioja y Catamarca, y la segunda en las provincias de Santiago del Estero, Chaco, y la Ciudad de Buenos Aires.
En 18 de las 24 provincias se generaron nuevos empleos registrados en la cadena de valor en el último año. Se destaca particularmente el importante crecimiento registrado en las provincias de La Rioja y Catamarca, de 12,3% y 22,9% respectivamente, con 814 nuevos empleos en ambas provincias, así como los 1.628 empleos generados en la Ciudad de Buenos Aires.
Nivel de actividad
La industria textil y la fabricación de prendas de vestir y calzado mantienen niveles de actividad similares a los previos a la pandemia. A pesar de que ha logrado recuperar el nivel de actividad previo a la pandemia, no puede aún alcanzar los niveles evidenciados en años previos (2016 y 2017).
La fabricación de indumentaria muestra un mejor comportamiento mensual durante el año 2023, siendo la segunda actividad industrial de mayor crecimiento durante el mes de agosto 2023.
En comparación con toda la industria
Durante el período enero-agosto 2023, la actividad de la industria manufacturera en su conjunto no registró variación contra el mismo período de 2022.
La evolución del Índice de Producción Industrial (IPI) medido por el Indec muestra niveles de actividad similares a los del año 2016, dando muestra de la recuperación del nivel de actividad de la industria, superando la caída de los años 2018 y 2019, y la menor actividad producto del impacto de la pandemia COVID-19 en el año 2020.
En agosto 2023, la actividad de la industria manufacturera retrocedió un 3,0% en forma interanual, siendo el tercer mes de caída consecutiva en forma interanual registrados en el año.
La industria textil
La industria textil viene recuperando sostenidamente su nivel de actividad, ubicándose por encima de la evolución pre-pandemia (2019) pero sin alcanzar aún los nivelesde los años 2016 y 2017, lo que se observa en la evolución modesta de su desempeño reciente y en el menor uso de capacidad instalada.
La actividad de la industria textil viene exponiendo un comportamiento mensual errático durante el año 2023, lo que explica la caída del 1,0% durante el acumulado del año 2023 contra enero-agosto 2022.
Prendas de vestir y calzado
La fabricación de prendas de vestir y calzado presenta un mejor panorama, con un aumento interanual en agosto 2023 del 4,5%, cifra que llega al 4,8% si se compara con el mismo período de 2019.
Luego del crecimiento evidenciado durante el año 2022 (+7,0%), este subsector muestra un buen desempeño entre las ramas industriales en el acumulado del año 2023, con un crecimiento del 4,5% en forma interanual. Este crecimiento en el acumulado enero-agosto 2023 es el segundo más alto dentro de los rubros industriales analizados por el Indec, luego de “Vehículos automotores”.
Importaciones
Se registró una caída de las importaciones en el año 2023, luego del monto récord evidenciado en el año 2022.
Las importaciones de productos textiles e indumentaria alcanzaron durante el período de enero-septiembre 2023 las 217.465 toneladas y los 1.213 millones de dólares.
Este monto implica una caída total de un 23% en toneladas y un 12% en dólares contra el mismo período de 2022, con caídas también en dólares y toneladas para todos los rubros en particular en forma interanual, salvo en el de “otros textiles” y “prendas de vestir”.
Durante el año 2022, las importaciones sumaron 363.419 toneladas y 1.790 millones de dólares, monto que en toneladas superó al total de las importaciones récord de la cadena en el año 2011, cuando se importaron 306 mil toneladas y 1.840 millones de dólares.
Del análisis de la evolución de la importación a niveles de los diferentes rubros textiles durante el período enero-septiembre 2023, se observan importantes caídas contra el mismo período del año 2022, así como un sostenido aumento de las compras en el exterior del rubro “otros textiles” y el de “prendas de vestir”.
Mientras que las compras de “hilados”, “tejidos planos”, “tejidos de punto” y las “confecciones para el hogar” muestran caídas superiores al 20% en dólares y toneladas durante el acumulado de los nueve del año 2023, las del rubro “prendas de vestir” muestran incrementos superiores al 40% en el mismo período, y el de las importaciones de “otros textiles” un aumento cercano al 10% en dólares y toneladas.