Fuente: El Economista – «Es hora de desligarle a la industria nacional el tema del precio y analizar qué pasa en el segmento comercial donde actúa el coeficiente de multiplicador del precio de la ropa», dice ProTejer.
El fin de semana se viralizó un contenido en X que mostraba una campera importada en el supermercado a $60.000 anunciando el fin de la industria nacional y algunos usuarios incluso lo festejaron.
Desde ProTejer aprovecharon el viral para salir a dar contexto. «Lamentablemente, desde hace muchísimos años el 98% de las camperas que se venden en Argentina son importadas. De vuelta, se confunde el precio de la ropa con la participación de la industria nacional cuando la distorsión de precio está relacionada con el eslabón comercial», dijeron.
El 2023 fue récord de volumen importado de camperas y el primer bimestre del 2024 se encuentra alineado a esos volúmenes. Sólo 20 importadores representan más del 52% del volumen total importado de camperas de todo el país destacándose dos canales de comercialización: las marcas premium y los supermercados.
Otro dato para tener en cuenta: analizando todos los primeros bimestres de año desde 2015 a 2024, se observa que en 2024 el precio en dólares por kilo importado es mucho más bajo que años anteriores. En enero-febrero 2024 el precio fue de US$ 19,69 el kilo mientras que en enero-febrero 2015 Argentina importaba camperas por US$ 31,64 el kilo.
«Esto muestra que el mix importado es de menor calidad acorde con la degradación del mercado interno. Y es también explicado porque, si bien China se mantiene como el origen del 85% de las importaciones de camperas, han crecido Vietnam, Bangladesh y Cambodia, 3 países con condiciones productivas en tensión con respecto a los derechos laborales, al nivel de contaminación y al uso de químicos y productos nocivos para la salud de los consumidores», dijeron.
Este es un claro ejemplo de la gran diferencia de precio de la ropa entre los distintos canales de comercialización como shoppings y supermercados y en un segmento donde la industria local no tiene participación ya que son productos importados, agregaron. Por ejemplo, dicen, una campera en un negocio en la calle Avellaneda vale $20.000, una campera similar en el supermercado como la que se viralizó vale $60.000 en o una campera similar de marca como Zara en un shopping triplicaría su precio como mínimo.
«Es hora de desligarle a la industria nacional el tema del precio y analizar qué pasa en el segmento comercial donde actúa el coeficiente de multiplicador del precio de la ropa. Seguramente el peso del posicionamiento de la marca, el costo de alquiler en shopping, el costo financiero y el costo logístico expliquen, en buena medida, estas divergencias. Todos costos que no son industriales», sentencian.
analicemos el costo Nacional!
confeccion!
adquisicion de materias primas ( lo que hay es importado)
avios! ykk es chino