En Primera Persona, Francisco Acosta Socio Gerente de Silqui-Tex

Fuente: @silquitex – Compartimos la historia de vida, dedicación y pasión de quienes hacen fuerte la Industria Textil Argentina, un ejemplo inspirador para todas las generaciones

En la actualidad Silqui-Tex cuenta con más de 5000m2 donde almacena un amplio stock de maquinaria y repuestos para la industria textil, también contamos con oficinas en España y China; Pero todo esto comenzó de una manera muy singular….

… Cuando tenía 10 años mis padres emigraron a Buenos Aires, barrio San Andrés Partido de San Martin. Empecé la secundaria en el colegio Martin Güemes de Florida, que en ese momento era una escuela fabrica donde se daban 2 horas de teoría y 2 horas de práctica donde había una materia que era Industria Textil, lo cual me interesaba mucho.

Cursando mi segundo año lamentablemente la escuela cerro (1965) por esta razón no pude terminar mis estudios. Después de eso pase por diferentes trabajos, por ejemplo: Cadete en una farmacia, fábrica de plásticos y repartiendo películas en los cines con una moto. Este último trabajo lo hice hasta que me toco el servicio militar a los 20 años.

Al finalizar el servicio militar seguí trabajando con la moto llevando películas a los cines pero mis padres querían un mejor trabajo para mí ya que con la moto era muy peligroso y hablaron con un vecino que era jefe del taller electrónico en Talleres COGHLAN, justamente en ese momento estaban necesitando 10 aprendices, la meta de esa incorporación era formar 1 o 2 montadores ya que COGHLAN en el año 1970 había firmado con la empresa RIETER para fabricar la máquina de hilar Continua GOTARDO.

El 70% de esta máquina se fabricaba en Buenos Aires. Mi incorporación como aprendiz en COGHLAN fue en marzo de 1972, nuestro horario como aprendiz eran 8 horas (4 horas de teoría y 4 horas de práctica).

El sistema de aprendizaje era rotar a los aprendices por distintas áreas de trabajo empezando por fundición, herrería, tornería, frezado y montaje.

Antes de montaje de cada maquina se prearmaba en el depósito colocando las patas, bancadas, cilindreras, luego se marcaba para el montaje en destino.

Mi periodo de aprendizaje fueron 9 meses y luego a cada aprendiz se le destinaba un sector diferente de la fabricación y a mi lamentablemente me toco herrería que realmente no me gustaba, después de 1 mes de trabajar en ese sector pedí el traslado a montaje adonde realmente me gustaba y jefe del sector montaje no quería que me trasladaranasí que me dijo que si quería estar en ese sector tenía que inventariar 30.000 tuercas arandelas y tornillos y que solo tenía 60 días para hacerlo, si no lo terminaba volvería a herrería.

El trabajo lo termine en 30 días y por eso obtuve un puesto como ayudante de montaje, trabaje con el Sr. Roque Calocero quien me enseñó a nivelar y ajustar el premontaje.

Como yo realmente quería aprender más y rápidamente, fuera del horario de trabajo me iba a una fábrica cercana (SEDALANA) que tenía 10 Continuas GOTARDO y me ofrecí para trabajar 3 horas por día sin paga solo para aprender.

Luego de un tiempo termino el periodo de aprendizaje como ayudante de montador y todos los aprendices teníamos que pasar un examen que justamente era en SEDALANA, pase el examen con una calificación excelente ya que sabía mucho más que los otros aprendices por haber trabajado gratis para SEDALANA solo para aprender más y más rápido, inclusive sabia cosas que no nos habían enseñado durante el periodo de aprendizaje, yo nunca le comente a nadie que trabaje sin que me paguen en SEDALANA.

Después de un tiempo el jefe de montaje me pregunto si me sentía capaz de viajar a GRAFA Tucumán adonde había 14 maquinas de las cuales 7 estaban teniendo problemas (se rompían las linternas) por su puesto dije que sí, esa era mi oportunidad de demostrar lo que había aprendido, en ese momento yo tenía 23 años y nunca había viajado en avión, ni siquiera tenía valija asique tuve que pedir una prestada.

Finalmente viaje a Tucumán y allí me estaba esperando el chofer de GRAFA que me llevo al hotel.

Al día siguiente el mismo chofer me llevo a ver al gerente de Grafa a su oficina y el gerente me vio tan joven que me dijo que el había pedido un montador no un aprendiz, yo contesté que antes de calificarme como aprendiz debería ver como trabajaba. Empecé la revisión de las maquinas con 3 ayudantesy note que la nivelación era un desastre así que el trabajo me llevo 3 meses para poder solucionarlo.

Para cada máquina que nivelábamos pedía que el director de la fábrica me firmara la hoja de nivelación como confirmación de trabajo terminado ya que las maquinas estaban todavía estaban en garantía.

Pasados aproximadamente 3 meses de la finalización la empresa Grafa volvió a reclamar el mismo problema con las maquinas, obviamente me llamaron a la oficina de los gerentes de Talleres Coghlan para reclamar que mi trabajo no fue echo correctamente y debido a que yo tenía todas las hojas de nivelación firmadas por el gerente de Grafa RIETER no tuvo que hacer el trabajo por la garantía ya que el problema estaba en los pisos de la fábrica Grafa no era problema del montaje.

Luego de este trabajo ya quedé como montador oficial de las continuas GOTARDO después arme 4 continuas para TEXTIL ALFA Moron, 14 GOTARDO para POLAMBROSIO Tucumán que me llevaron. 11 meses terminar este montaje en el año 1975, en ese montaje vino de visita el gerente general de Talleres COGHLAN el Sr. Rolf Kempf, que desde ya no me conocía ya que tenía 800 empleados que le llamo mucho la atención lo bien que había aprendido el sistema Suizo de trabajo y me pidió que cuando vuelva a Buenos Aires lo vaya a ver a su oficina.

Cuando volví efectivamente fui a verlo a su oficina y no estaba solo estaba con otros gerentes que se habían enterado lo que había hecho en Sedalana de trabajar gratis solo para aprender más y me querían dar un reconocimiento en dinero, realmente no recuerdo el monto pero yo estaba a punto de casarme con mi novia y esto nos alcanzó para compra los electrodomésticos y los muebles que nos faltaban lo cual todavía estoy muy agradecido por el reconocimiento de parte de la empresa.

Luego de esto seguí montando continuas 8 en SAIA San Isidro y 8 en BOLZALONA Paternal.

En 1976 la empresa me mando a montar a TEXTIL EQUINOSIAL Quito Ecuador a mitad de montaje la empresa me ofreció la oportunidad de traer a mi esposa para que este un tiempo conmigo en Ecuador en donde quedó embarazada de mi primer hijo.

Cuando volvimos a Buenos Aires fue a montar Continuas a TECOTEX Tucumán, TIPOITI Corrientes, TEXTRICO Burzaco, PRIMOTEX Valentín Alsina y la última empresa adonde monte GOTARDO fue a 1 mes de haber nacido mi segundo hijo en HILADOS FINOS PUEBLAS México, este montaje duro 5 meses (este montaje me costó muchísimo ya que no pude estar los primeros meses con mi esposa e hijo recién nacido)

Mi esposa y yo vivíamos en una casa frente a la empresa, era una de las casas que Talleres Coghlan le daba a los montadores hasta que la empresa Talleres Coghlan cerro en 1982, por suerte la empresa nos dejó quedar un tiempo en la casa por si alguna empresa de las que había comprado continuas necesitaba mantenimiento.

Luego RIETER me ofreció irme a Suiza con la familia, pero no acepte preferí quedarme en Argentina y probar suerte en Argentina. Los primeros tiempos fueron muy duros ya que no conseguía trabajo. Con mi esposa íbamos casi todos los días a pedirle a San Cayetano a que nos ayudé a conseguir trabajo y por suerte me llamaron de TIPOITI Corrientes para un trabajo de desmontaje y traslado de las continuas a otro lugar en donde estuve 9 meses trabajando, como era un trabajo de muchos meses fui con mi familia (Esposa e hijos). Siempre voy a estar muy agradecido a la empresa TIPOITI (Sr. ZOLNER) ya que dio una casa hermosa por esos 9 meses.

Al finalizar ese trabajo volvimos a Buenos Aires, cuando volví me enteré que TALLERES COGHLAN estaba por vender todo el stock de repuestos, matrices, dispositivos de montaje etc. a un chatarrero.

La condición de venta era que había que comprar todo junto y era muchísimo dinero… Estuvimos varios días pensando con mi esposa para decidir esta inversión, pero finalmente decidimos comprar todo para empezar nuestro propio negocio, los señores Marcos Budeski y Roberto Fernandez nos ayudaron a decidir ya que eran personas con mucha experiencia.

Para almacenar todos lo que compramos tuvimos que alquilar un depósito de 300 metros cuadrados, después de esta inversión paso 1 año y yo todavía no tenía trabajo fijo hasta que me contrato el Sr. Blumberg de la empresa PRIMOTEX allí estuve unos 8 meses y luego recibí un llamado de la empresa BOLSALONA Sr. Derritis que me ofreció la dirección de la fábrica y el pago sería el doble de lo que estaba cobrando en PRIMOTEX.

Yo no tenia experiencia como director de fábrica, mi experiencia era como montador así que me toco aprender, así que pude armar un buen equipo de trabajo y pasamos de producir 100.000 Kg por mes a producir 200.000 kg al mes en solo 60 días. En algún. Momento debí tener custodia personal ya que el delegado de la fábrica no quería trabajar y me toco despedir a algunos trabajadores que no cumplían con sus trabajos.

Luego de mi horario de trabajo en BOLSALONA salía a ofrecer nuestros repuestos a muchas de las fábricas que ya me conocían como montador de RIETER y a su vez empezamos a ordenar todos los cajones recibidos y hacer un inventario, en un Principio no podía costear un empleado así que este trabajo lo hice con mi suegro Geronimo Dillmann.

También había muchas matrices que había comprado que estaban en los talleres que inyectaban para TALLERES COGHLAN así que me toco recuperarlas.

A principios de 1984 nos empezó a ir mucho mejor con la venta de repuestos así que renuncia a BOLSALONA y decidimos dedicarnos a trabajar por nuestra cuenta, con la experiencia que había adquirido en una fábrica de todo el proceso de fabricación de hilado. Con el tiempo me fui haciendo conocido en el mercado y también muchos clientes me empezaron a llamar para la compra y venta de maquinaria usada.

Entonces decidimos crear una empresa a la cual le pusimos SILQUI-TEX SRL en honor a nuestros 2 hijos Silvio y Enrique (Apodo Quique).

A partir de 1986 empezaron a cerrar muchas empresas textiles y nosotros empezamos a comprar fábricas en block y vender maquinarias por separado así pudimos expandirnos en todos América del Sur.

Hasta 1990 alquilábamos un depósito de 500 mts en Munro, pero como el negocio iba muy bien decidimos comprar nuestro propio depósito de 1000 metros a unos metros del que alquilábamos. Mi esposa Maria Crsitina Dillmann siempre estuvo a cargo de la oficina ocupándose de toda la parte contable y también de cuidar a nuestros 2 hijos.

En el año 1991 fui a mi primera ITMA en Europa en donde empecé a contactarme con gente de otro continente.

En 1996 se incorpora a la empresa mi hijo mayor Enrique Acosta para aportar ideas nuevas a la empresa y seguir creciendo, la empresa siempre fue cuesta arriba inclusive en las épocas malas del país para el textil.

En el año 2002 se incorpora mi hijo menor a la empresa también trayendo nuevas ideas para modernizar nuestros sistemas de trabajo.

Mis hijos empezaron a viajar por diferentes lugares del mundo comprando maquinaria de segunda mano de esta manera se pudieron cumplir con todos los requerimientos del mercado hasta en las peores épocas.

Hoy contamos con más de 5000 m2 en donde almacenamos un amplio stock de maquinaria y repuestos para la industria textil, también contamos con oficinas en España y China. Ya hace unos meses que empezamos a representar varias marcas europeas y asiáticas de maquinaria y repuestos nuevos.

En estos 2 últimos años se incorporaron a la empresa 2 de mis nietos Valentin Acosta y Benjamin Acosta.