Fuente: Ambito ~ Desde agosto hay un 38% más de actividad que en febrero. Las mejoras continuaron en septiembre y octubre y se proyectan alzas para el último trimestre.
Luego de la fuerte contracción que produjo la pandemia, el sector textil se recupera a paso acelerado. Según datos que difundió la Fundación ProTejer, que agrupa a las firmas integrantes de la cadena, la producción en agosto creció un 38% con respecto a febrero de este año. Analizando los relevamientos de consumo de energía, se evidencia que la actividad continuó creciendo en septiembre y octubre. Los empresarios estiman que en el último trimestre del año se registrarán incrementos. La sustitución de importaciones hace crecer las inversiones, el nivel de empleo y se proyecta alza en el uso de la capacidad instalada.
Uno de los factores fundamentales, que está impactando en la mayor demanda, es la baja en la cantidad de productos importados que ingresan al país. Por el cierre del turismo y por la administración del comercio exterior. “Hay un proceso de sustitución de importaciones en marcha. Durante el Gobierno de Macri llegamos a tener un 70% de participación de los productos fabricados fuera del país, hoy hay sólo un 20% frente a un 80% de manufacturas nacionales en el sector”, señaló a Ámbito Luciano Galfione, secretario de ProTejer. En este sentido remarcó que “muchos supermercados y cadenas de retail están volcándose a los proveedores nacionales y encargando productos para la temporada que viene”.
A contramano del componente estacional habitual del sector, cuyo nivel de producción suele disminuir hacia finales de año, se esperan alzas para el último trimestre. Esto implicaría que, dado el freno derivado de la pandemia en los meses anteriores, las empresas incrementarían la actividad para compensar la caída. “Hay una perspectiva muy buena para fin de año y comienzo del que viene. Ya tuvimos un repunte más que importante, hace más de dos meses que hay un crecimiento acelerado y estamos en un 60% de la capacidad instalada”, señaló a este medio el titular de la textil ZADIG SA, Mauro González.
Las buenas perspectivas se cristalizan en inversiones que ya están comprometidas. De acuerdo con lo anunciado por el Ministerio de Desarrollo Productivo que conduce Matías Kulfas, para el 2021 se proyectan desembolsos por unos u$s250 millones en nuevos proyectos industriales. De esta manera, se superaría el récord de 2011, que fue el año con mayor nivel de inversión de la década.
“Diversos representantes de la cadena de valor nos manifestaron el cambio de tendencia en la producción. El sector pudo reconvertir parte de su actividad hacia la generación de insumos médicos y en cuanto se dio la apertura hubo un impulso fuerte por la demanda de sus productos”, detalló a Ámbito la subsecretaria de Industria, Julieta Loustau. Al mismo tiempo, sostuvo: “La buena situación se ve reflejada en las reuniones de Mesa sectorial del Acuerdo Económico y Social donde los principales temas planteados pasan por una agenda de mayores inversiones, capacitación y mejora tecnológica”.
El relevamiento de ProTejer también evidencia un aumento del 15% en el nivel de empleo en relación con el año 2019. En los eslabones de capital intensivo este aumento resultó más relevante mientras que en el segmento de la confección fue menor. Aunque se estima que este último se recompondrá hacia finales de año y principios de 2021 al calor de la nueva temporada.