Fuente: Clarín ~ No hay manera de imaginar, viendo la entrada a Amesud, lo que hay adentro. La cuadra de acceso está pegada a las vías del ferrocarril Urquiza, con veredas estrechas y mucha basura amontonada. Tras atravesar el portón, el patio de entrada muestra la fachada de una vieja fábrica, con una enorme chimenea fuera de uso y muros de ladrillo que remiten a otras épocas. Recién adentro se entiende por qué Amesud es probablemente la planta textil más moderna de la Argentina, que abastece con sus telas a 400 confeccionistas.
En los pabellones se extienden 90 máquinas tejedoras alemanas, marca Mayer –precio de mercado, entre 60.000 y 80.000 euros cada una– que fabrican tejido circular, de frisa, jersey e interlock.
Más allá están los trenes de tintorería. Son máquinas de teñir de tamaño mediano, desde las cuales la tela pasa luego a la tundosa (un corte a cuchilla del pelo del tejido, que lo nivela y le hace ganar tacto). Son trenes chicos, que cargan 200 kilos de tela. Hay tres, cada uno a un precio de entre 120.000 y 140.000 euros...ver más