Fuente: Ambito ~ El Gobierno porteño hizo ayer un relevamiento sobre cómo funcionó el primer día de la apertura de comercios minoristas con venta al público, que teóricamente deberían atender a las personas con DNI terminado en número par.
Los funcionarios aseguraron que en el 90% de los comercios que reiniciaron su actividad se respetaron las indicaciones de seguridad y protocolos, que fueron monitoreados por la Agencia Gubernamental de Control.
Otro dato, en ese sentido mostró que de un total de 282 locales relevados el resultado fueron 5 clausuras en los barrios de Once, Villa Crespo, Microcentro y Palermo por venta de indumentaria, un rubro que todavía no está exento en la cuarentena ni lo estará por ahora, tanto como la venta de calzado.
Para las autoridades porteñas “fue muy positivo el primer día de apertura comercial y las medidas de seguridad sanitaria, previstas por los protocolos, se cumplieron ampliamente”.
Para controlar el funcionamiento, la administración porteña dispuso de 97 inspectores de la Agencia Gubernamental del Control que controlaron en 21 puntos de los Centros Comerciales de la Ciudad. El objetivo, para el despliegue de inspectores, partió en principio de difundir los protocolos y hacer una verificación del cumplimiento de los rubros habilitados desde ayer, a los que se sumarán más mañana (ver nota aparte).
Los funcionarios de la Ciudad creen que “no se detectó un desborde de gente en la calle, con parámetros lógicos y esperables en los movimientos”.
Por otra parte, se señaló que los dos centros comerciales más importantes de la Ciudad, Once y Avellaneda, tienen los comercios cerrados y, eventualmente, sólo despachan a puerta cerrada aquellos pedidos que se realizan por venta online.
Además, según FECOBA, del total de los comercios habilitados para funcionar, 73% abrió sus puertas y atendió una moderada afluencia de público, y demanda restringida.