La era coronavirus cambió todo. Ya nada será lo mismo. Y una vez que se levante la cuarentena, los locales de ropa reabrirán sus puertas pero tendrán que adaptarse al nuevo protocolo que nos impone el covid-19. En China y Europa ya lo están implementando. El modelo podría aplicarse en la Argentina. Te contamos de qué se trata.
En medio de este contexto de pandemia y cuarentena global, cuesta imaginar cómo se va a reiniciar la actividad comercial en la era coronavirus. Sin embargo, en China y Europa ya se comienzan a abrir algunas tiendas de ropa. Inditex (la cadena que engloba a Zara y Mango entre otras marcas) se prepara para comenzar a abrir tiendas en Europa. Las medidas restrictivas se empiezan a aflojar en algunos países como Alemania, donde Zara ya tiene algunas tiendas abiertas.
Las tiendas deberán seguir un protocolo
En esta reapertura, Inditex elaboró un protocolo con medidas que deberán tomar los trabajadores de las distintas marcas, una vez los puntos de venta comiencen a abrir. El documento contiene propuestas generales para todos los mercados afectados por los cierres, pero se adaptarán a las circunstancias legales de cada país y a los convenios sindicales para definir un plan que sea efectivo.
“Inditex mantendrá una comunicación fluida con los empleados en atención a la evolución general de la situación, en coordinación con recursos humanos y seguridad y salud laboral en línea con las recomendaciones que en su caso emitan las Autoridades sanitarias locales”, dice el documento, que impone: establecer medidas higiénicas y organizativas para reducir el riesgo de exposición y propagación del virus en áreas de trabajo; y adaptar los procesos en las tiendas con stock integrado, que también funcionan como receptoras de pedidos online.
El control diario de temperatura por parte de los empleados antes de ingresar a la tienda para trabajar es una de las medidas impuestas por Inditex. “En caso de que sea superior a 37,5 grados no acudirá a la tienda”, dice el documento. Si presenta síntomas compatibles con Covid-19, al igual que aquellos que hayan pasado la enfermedad o que estén en contacto con alguien que la atraviese, deberán consultar con recursos humanos. Los trabajadores con factores de riesgo, no serán parte de la primer etapa de reaperturas de tiendas.
Todos los empleados deberán usar de manera obligatoria tapaboca o barbijo casero y guantes. El alcohol en gel deberá estar disponible en las cajas, zonas comunes, en la entrada a la tienda para los clientes, en los almacenes internos y externos y en los probadores.
En los probadores se restringirá su uso según su capacidad para garantizar las distancias de seguridad. Cada vez que un cliente salga del probador, se desinfectará el espacio.
En las cajas, Inditex propone que se haga fila en líneas recta, respetando distancia de seguridad. Además, se limpiarán los dispositivos electrónicos con desinfectante al acabar cada turno.
Este protocolo también limita al máximo el uso y presencia de empleados en los almacenes, en los vestuarios, o en las áreas de descanso. Además el ingreso de los trabajadores a las tiendas será en forma escalonada y (en lo posible) por accesos secundarios. Por otra parte, se tendrá que respetar la distancia de seguridad a la hora de recibir mercancía.
En lo que respecta al cliente, además del uso obligatorio de barbijo, tiendas como Mango y Desigual exigen el uso de guantes. Y se controlará la cantidad de personas que ingresen al local (como máximo podrá haber una persona por cada 10-20 metros cuadrados).
Con este protocolo, Mango (ya abrió 135 puntos de venta y piensa tener 620 abiertos a fin de mes) empieza a abrir tiendas en algunos países de Europa, Desigual lo hace en Austria, Holanda y Alemania. Sólo están permitidas hasta el momento la reapertura de tiendas de un tamaño menos a los 600 metros cuadrados.
Y próximamente se abrirán locales en la República Checa, Letonia, Georgia, Chipre y Ucrania. China, por su parte, abrió las tiendas hace ya dos semanas.
Desde Armani, por ejemplo, están evaluando la manera de implementar la desinfección de las prendas “con el uso de vapor caliente y ozono” y van a aplicar restricciones en el uso de los probadores.
En H&M decidieron anular definitivamente los probadores y facilitar el proceso de devolución. Primark también implementará la misma medida.
¿Qué pasa con las prendas que son devueltas? Mango dispuso que “las prendas que sean devueltas o que alguien se haya probado permanecerán 48 horas en cuarentena (ya que el virus puede vivir ese tiempo en la ropa) antes de ser expuestas de nuevo al público”. Además estudian someter las prendas a tratamientos descontaminantes con luz ultravioleta u ozono.
Así y todo la compra digital será la mejor alternativa (y más segura) en la etapa post cuarentena. Desde marcas como Alexander Wang sugieren que el local será una vidriera para potenciar el comercio online. Y ya grandes emporios se preparan para instalar el Click and Collect, un modelo que ya empezaron a implementar Zara o Walmart y que consiste en recoger las compras digitales en el espacio físico a través de una máquina y un código QR.
Los puntos del protocolo que podrían implementarse en Argentina
En vistas que a nuestro país el virus llegó más tarde, las experiencias de los países que nos preceden en esta cuestión nos sirven para implementar en Argentina. Por eso no sería extraño que estas medidas adoptadas en China y Europa con respecto a la reapertura de locales de ropa, se aplique en un futuro acá. Estos serían los puntos del protocolo resumidos:
- Control de ingreso de clientes al local (1 persona cada 10-20 metros)
- Los clientes ingresarán con barbijo y guantes.
- Se le controlará la temperatura a cada uno de sus empleados antes de ocupar su puesto laboral.
- Todos los empleados deberán usan barbijo y guantes.
- El alcohol en gel deberá estar disponible en varias áreas del local.
- En los probadores se respetará la distancia de 1,5 metros y además será desinfectado cada vez que salga algún cliente de allí.
- Las prendas se desinfectarán y en caso de devolución, se mantendrán 48 horas apartadas que es la vida que tiene el virus en la ropa, o será desinfectada.