~La Nación~ La marca de moda acaba de lanzar una nueva línea de corpiños, bombachas y boxers, proyecto impulsado por empleadas de la compañía. Estas mujeres, que han tenido malas experiencias con ropa interior rasposa, demasiado sexuada, creen que los consumidores de hoy tienen una filosofía diferente sobre la ropa interior que generaciones anteriores. Por cierto, son tan fuertes sus convicciones al respecto que han escrito una especie de «manifiesto de la ropa interior» en el sitio de Everlane.
Por empezar, se niegan a producir ropa interior con encaje innecesario, zonas traslúcidas y moños: apuestan a que a los consumidores hoy les importa más cómo se siente su ropa interior que cómo se ve y quieren piezas que se mantengan suaves y elásticas después de muchos lavados. Y estas mujeres también insistieron en encontrar la fábrica de ropa interior más sustentable y ética del mundo, porque están seguras de que a los clientes les importa lo que se usó para hacer el primer artículo de vestimenta que colocan sobre su piel cada día.
Coherencia comercial....ver nota completa